Esta plataforma de ayuda surge tras más de una década observando las terribles secuelas que la industria del aborto ha dejado, impunemente, en los cuerpos y las mentes de decenas de miles de mujeres en nuestro país.
Desposeídas de recursos y cargando con el peso de los daños, hemos sido testigos de la soledad e incomprensión a las que las instituciones las han sometido.
Nos negamos a que más mujeres sufran este engaño.
Por eso nos plantamos ante esta industria millonaria y les obligamos a ser consecuentes con su actuación en el pasado.